Elsa en Londres 2012. [Foto: Mauricio Keyne] |
Elsa Baquerizo es la otra mitad de nuestra pareja olímpica de voley
playa femenino. Después de las declaraciones de su compañera, Liliana Fernández, nos toca hablar con ella de los Juegos, de psicología deportiva y de
sus expectativas de futuro. Al igual que su pareja, Elsa luce un apellido
extranjero, el estadounidense "McMillan". En el caso de Liliana, de
ascendencia croata, el apellido materno es Steiner. Curiosidades aparte, juntas
están consiguiendo que en España se empiecen a desterrar los prejuicios de un
deporte cada vez más respetado.
ISABEL GARZO. ¿Cómo termina
una madrileña especializándose en un deporte de playa?
ELSA BAQUERIZO: La verdad es que
empecé en la playa por diversión. Me iba en verano con el coche a competir por
España en los distintos Campeonatos que había. Un año representé a la Comunidad
de Madrid en el Campeonato de España Sub-21 y allí fue donde los técnicos del
centro de alto rendimiento de Arona (Tenerife), Sixto Jiménez y Daniel Rodríguez,
me ofrecieron la oportunidad de irme a las islas a dedicarme al voley playa. ¡Y
después de mucho pensar, me fui!
IG. ¿Cómo te
complementas con tu actual pareja de competición, Liliana Fernández?
EB. Nos complementamos
muy bien. Creo que tenemos mucha química en el campo y las dos somos muy
ganadoras. ¡Eso nos hace muy fuertes!
IG. ¿Qué se siente
al formar parte de la primera pareja española de voley playa femenino que
asiste a unos Juegos Olímpicos?
World Tour de Shangai. [Foto: FIVB] |
EB. Nos sentimos muy
orgullosas de ser las primeras en representar a España en unos Juegos Olímpicos.
Creo que le da mucha vida al deporte femenino y sobre todo al voley
playa.
IG. ¿Habéis notado
un cambio en el interés de los medios y del público por vosotras tras estos
Juegos Olímpicos?
EB. Sí. ¡La
repercusión mediática que han tenido los juegos ha sido enorme! En nuestro Facebook
se han unido al grupo alrededor de 4000 personas, ¡si no son más! Ojalá se
mantenga este interés por el voley playa, creo que es un deporte muy
espectacular y que puede atraer a muchos espectadores.
IG. ¿Es alentador
pensar que jugasteis un partido bastante igualado contra la pareja que después
se llevaría la plata olímpica, las estadounidenses Kersy-Ross?
EB. ¡Claro que sí!
Creo que eso demuestra que estamos al nivel, pero hay que seguir trabajando muy
duro. Tenemos que seguir mejorando aspectos psicológicos del juego y seguir
ganando en experiencia, que es lo que al final te da los resultados en este
deporte.
Elsa durante el World Tour de Stare Jablonki. |
IG. ¿Tuvisteis
ocasión de seguir las andanzas de la pareja masculina de voley playa, Herrera y
Gavira, o vuestra concentración no os lo permitió?
EB. Por supuesto.
Somos muy amigos y además estuvimos conviviendo con ellos y nuestros
entrenadores en un mismo piso. En las olimpiadas hay tiempo para todo. Creo que
es imprescindible desconectar de la competición de vez en cuando, sobre todo en
nuestro deporte, que dura dos semanas y se juega cada dos días. La verdad es que
tenemos suerte en ese sentido, creo que nos ha dado tiempo a disfrutar de la
competición, amigos, familia y todo lo que rodea las olimpiadas.
IG. ¿Qué te
gustaría que hubiera mejorado en vuestro juego cuando lleguéis a Brasil?
EB. ¡Sobre todo la
cabeza! Creo que a nivel físico y de juego hay que seguir evolucionando, pero
sobre todo, como he dicho antes, este deporte es mucho más psicológico de lo
que parece. Somos dos en el campo, es un deporte muy individual, y se requiere
de mucha experiencia para estar arriba, entre las cinco primeras parejas del
mundo.
IG. ¿Cómo
convencerías a los que consideran el voley playa un deporte menor y poco
evolucionado de que es una disciplina seria?
Elsa celebra un punto en Londres 2012. [Foto: Mauricio Keyne] |
EB. Creo que el voley
playa es un deporte menor y poco evolucionado dependiendo del país del que
estemos hablando. En Brasil es un deporte de los de arriba, en Alemania, China,
Estados Unidos y en muchos otros en los que jugamos a lo largo del año es un
deporte muy practicado, muy visto y con un nivel espectacular. Como cualquier
deporte profesional requiere de una planificación, un entrenamiento muy duro y
mucho trabajo detrás. Si hablamos de seriedad, creo que el mero hecho de que
esté en unos Juegos Olímpicos y sea el deporte más visto le da seriedad
suficiente.
IG. Como estudiante
de pedagogía, y dado que la vida laboral de un deportista es más corta que en
otras dedicaciones, ¿contemplas la posibilidad de emprender algún proyecto
relacionado con niños y voley en el futuro?
EB. ¡Puede ser! No se dónde acabaré cuando termine mi carrera deportiva, pero
sí tengo pensado trabajar en la rama escolar y, por qué no, aplicar lo que he
aprendido estos años.
Elsa salva un punto durante el masters de Varna, en el que ganaron la medalla de bronce. |
El volley-playa tiene una atmósfera muy moderna: arena, deporte y música, es la combinación perfecta.
ResponderEliminarEn Londres supieron darle ese aire festivo con un DJ y con coreografías en las gradas.