JULIÁN GARCÍA-TORRES. PARTE 1: “Cuando uno está con gente joven, se siente más joven”

[Foto: C.V. Rochelambert]

Julián García-Torres es uno de los rostros más conocidos del voleibol internacional español. Este central de 2,02 metros y apellido más que apropiado acumula numerosas experiencias en las filas de la Selección, que también ha capitaneado. Perteneció al preciado grupo de 2007 y ha militado en los dos equipos que han encabezado la clasificación de la Superliga española (todavía bicéfala, aunque nos pese) los últimos años. Un jugador muy competitivo en el campo y una persona peculiar, de esas que a todos nos gusta conocer de vez en cuando, de las que hacen que te vayas de ese encuentro un poco más feliz de lo que llegaste. Publicaré sus respuestas en dos partes, porque en cuanto a dicharachero no tiene nada que envidiar a otros veteranos que han pasado por El sexto set. Espero acercaros un poco con estas líneas al lado más humano de una de las figuras más queridas de nuestro deporte.

Julián bloqueando con la camiseta del CAI Voleibol Teruel,
"enemigo" de su club actual [Foto: Heraldo de Aragón]

Isabel Garzo: ¿En voleibol, pasar de vestir de naranja a vestir de verde es similar a pasar en fútbol de vestir de blaugrana a vestir de blanco?

Julián García-Torres: Has dado en el clavo, ya que es el ejemplo que he puesto yo este año cuando los periodistas de Almería me preguntaban que cómo me sentía después de haber sido jugador de Teruel y jugar ahora en Unicaja Almería.
En términos de competitividad si que es similar, pero en este deporte es mucho más normal cambiar de un equipo al equipo de su competencia ya que el nivel económico del voleibol es muy inferior al del fútbol.

“ES EL PRIMER AÑO QUE LOS JÓVENES ME ESCUCHAN COMO A UN VIEJO”

IG: Unicaja ha apostado fuerte por jugadores muy jóvenes, muchos de ellos provenientes de la Selección Junior. ¿Cómo vives el trabajo día a día con jugadores a los que sacas hasta catorce años?

Presentación de García-Torres como jugador de Unicaja
Almería [Foto: RFEVB]

JG: Pues la verdad es que no me siento como el viejo del grupo porque hacemos muchas cosas juntos y me lo paso muy bien con tanta gente joven porque hace que recuerde las cosas que hacía cuando tenía veinte años. Nos llevamos muy bien y hacemos muchas bromas y tonterías.
Es el primer año en mi carrera deportiva en el que los jóvenes me tratan como si fuese un Viejo: siempre que hablo, ellos escuchan lo que les digo. Pero me gusta ser el mayor del equipo para aportar experiencia y tranquilidad en los momentos difíciles que nos podamos llegar a encontrar a lo largo de la temporada. Además intento ayudarles para que mejoren, ya que muchos de ellos seguramente serán el futuro del voleibol nacional.
Intento transmitirles la ilusión que yo tengo en este deporte y la competitividad que me caracteriza (todo el mundo que ha jugado conmigo sabe que no me gusta perder a nada y me "pico" mucho cuando pierdo a lo que sea). Y lo mejor de todo es que cuando uno está con gente joven se siente más joven.

IG: 3, 16, 15... ¿Eres menos supersticioso que otros jugadores con el número que vistes?

Lorena Weber luciendo
el número 15.

JG: Siempre he llevado el número 3 porque, cuando empecé a jugar a este deporte, empecé en un club humilde de mi ciudad (Sevilla), el Club Voleibol Rochelambert. Allí, un jugador del club, al que yo consideraba el mejor jugador del equipo, me dijo: "quiero que lleves el número 3 porque es el número que yo he llevado siempre y a mi me ha dado suerte. Espero que a ti te de la suerte que necesites para llegar a ser un buen jugador de voleibol". Ese es el motivo de llevar el número 3. Le tengo mucho cariño porque ese hombre me enseñó muchas cosas, de voleibol y de lo que no es voleibol, me ayudó a fomentar valores humanos como son el compañerismo, el trabajo, la constancia y muchas otras cosas más. No me gustaría despedirme del número 3 sin decir el nombre de este jugador al que todavía a día de hoy sigo admirando como jugador y como persona: Paco Joya.
El número 16 es simplemente porque cuando llegue a la selección era el número que me asignaron porque estaba libre al haberse retirado Juanjo Salvador, un grande de este deporte que además jugaba de central como yo. Y no he cambiado de número porque pensé que cuando me retirara o me retiraran de la selección, alguien podría "heredar" el número de Julián García-Torres.
El número 15 es un pequeño homenaje que he querido hacer a mi mujer, Lorena Weber, que era jugadora de voleibol y el 15 era el número que usaba ella cuando estaba en la selección española y quería, con este pequeño homenaje, darle las gracias porque siempre está cuando la necesito, que vea que la quiero mucho y que es una parte muy importante de mi vida. Al llevar su número durante los partidos es como si estuviera conmigo en todo momento. Sé que muchos lectores lo considerarán una cursilada pero es que en el fondo soy un romántico.

Julián durante uno de sus monólogos en la Paramount
Comedy

IG: Las incursiones que hiciste como monologuista de la Paramount tienen decenas de miles de visitas en YouTube, pero no te hemos visto recientemente en ese ámbito... ¿Algún proyecto de ese estilo fuera del deporte, o de momento lo tienes aparcado?

JG: Pues he hecho algunas actuaciones pero de momento tengo ese tema aparcado porque, como he dicho siempre, con cuarenta años podré seguir hablando pero no podré ser jugador profesional. Así que esperaré a terminar la carrera de jugador de voleibol para retomar la de humorista, ya que me gusta mucho y me gustaría ver cómo se me da. Además, mi hermano Fernando se dedica a los monólogos, empezamos los dos juntos escribiendo los monólogos que yo interpretaba, y cuando me fui de casa para dedicarme profesionalmente a este deporte, él dio el salto al escenario y hasta el día de hoy vive de eso. Los dos estamos muy unidos y me encantaría que pudiéramos poder trabajar juntos en espectáculos de humor.

“LO DE MOSCÚ FUE EL MEJOR MOMENTO DEPORTIVO QUE HE VIVIDO EN TODA MI VIDA”

IG: No puedo evitar pedirte que me cuentes de primera mano el tema de la final contra Rusia. ¿Cómo vivisteis esa sensación de impotencia por las injusticias arbitrales, seguida del enorme alivio tras la victoria?

JG: Pues si te digo la verdad, todo lo que puedo recordar de las injusticias de la final de Moscú son solo un par de balones que les pitaron dentro cuando fueron fuera. Eso con respecto a los árbitros, porque sí que recuerdo el enfado de Andrea Anastasi sacándose los bolsillos por fuera de los pantalones. Estaba muy enfadado con los árbitros e incluso se llegó a enfrentar al entrenador ruso. También recuerdo a Moltó bajándose los pantalones y enfrentándose a los árbitros. Pero no recuerdo muchas cosas malas más. Sé que fueron un montón de injusticias pero yo estaba completamente metido en el partido e intentando hacer todo lo que pudiera para jugar bien, porque confiaba en el equipo y en que al final ganaríamos.

De la victoria… ¡qué te voy a contar! Es el mejor momento deportivo que he vivido en toda mi vida. Tan grande que no me pude sostener en pie, y caí al suelo llorando de felicidad. En ese momento se te vienen a la cabeza todos esos momentos difíciles y duros que has tenido que pasar para llegar a encontrarte en esta situación, y comprendes que todo lo que has tenido que sacrificar o trabajar ha merecido la pena porque ha llegado la recompensa con la que cualquiera soñaría.

“ME GUSTA PENSAR QUE LA SUPERLIGA VOLVERÁ A SER UNA BUENA LIGA”

Julián conversa con Sergio Noda durante
la Liga Europea de 2009 en Sheffield
[Foto: Isabel Garzo]

IG: ¿Qué se te ocurre que podría suceder para que la Superliga española diera un vuelco radical y pasara a tener más calidad, más equipos, más patrocinadores, más atención de los medios, etc?

JG: Es una pregunta con una respuesta claramente difícil porque no depende de una sola cosa. Tendrían que cambiar muchas cosas, pero el problema principal que tiene este deporte es la crisis en la que España está metida, ya que lo principal es que no hay sponsors que den dinero a los equipos. Antes, cuando estaba España en auge y con muchas empresas con dinero para poder invertir en otras actividades, los equipos de voleibol salían beneficiados. Pero ahora es casi imposible encontrar empresas que inviertan algo en deporte, y si llegan a invertir, lo hacen en deportes como el fútbol o el baloncesto. Al tener menos presupuestos los equipos, tienen menos jugadores o jugadores de menor calidad, ya que el salario del jugador va directamente relacionado con la calidad del mismo. Al tener menos jugadores de calidad, la liga baja el nivel, y al bajar el nivel, los sponsors invierten menos dinero porque no les sale rentable. Vamos, lo que viene siendo la pescadilla que se muerde la cola.

Es una situación difícil la que está pasando el voleibol español, pero con tiempo y trabajando con los jóvenes españoles, creo que en un futuro volverá a subir poco a poco el nivel hasta llegar a ser una buena liga. Al menos eso me gusta pensar.

IG: ¿Qué equipos podrían dar sorpresas esta temporada?

JG: Hombre, yo creo que el equipo que puede dar un poco la sorpresa es Ibiza. Tiene los condicionantes para dar sorpresas, ya que es el primer año que disputa la Superliga, pero al mismo tiempo tiene un equipo con muchos jugadores que ya han pasado por otros equipos de Superliga anteriormente. A esto se une que tienen una base económica buena y estable, lo que hará que los jugadores estén siempre contentos a la hora de trabajar. Y por último tienen un pabellón que se llena todos los partidos y eso hace que jueguen con mucha motivación y al máximo.

Julián García-Torres, reflexivo [Foto: Almería 360]

IG: Una frase que te dijera un entrenador y te haya servido posteriormente.

JG: Pues hay una frase que me dijo un entrenador al que tengo mucho cariño. Jose Antonio Lorente me dijo: “me he dado cuenta de que cuanto más trabajo, más suerte tengo”.

Estoy completamente de acuerdo con esa frase y la utilizo mucho porque creo que la base del éxito es el trabajo.

IG: ¿A qué jugadores designarías para que hicieran a) la colocación perfecta, b) el saque perfecto, c) la recepción perfecta y d) el bloqueo perfecto?

JG: Bien, los jugadores que voy a decir son bajo mi punto de vista:

La colocación perfecta: Miguel Ángel Falasca (para mí, el mejor colocador de la historia de España).

El saque perfecto: Clayton Standley (opuesto de la selección de Estados Unidos).

La recepción perfecta: Hubert Henno (líbero francés que juega en Lube Macerata).

El bloqueo perfecto: Luigi Mastrangelo (central italiano que juega en Cuneo).

[MUY PRONTO, LA SEGUNDA PARTE DE LA ENTREVISTA... NO OLVIDES SEGUIR EL SEXTO SET EN FACEBOOK PARA NO PERDERTE NADA].

Julián, orgulloso capitán de la Selección Española durante
la Final Four de la Liga Europea de 2010 en Guadalajara
[Foto: Isabel Garzo]