Un equipo con doce titulares

Los jugadores escuchan el himno de España en Vilanova

Ayer España venció a Grecia por tres sets a cero en su cuarto enfrentamiento consecutivo. A nadie le sorprenderá leer que Palharini hizo un partido especialmente bueno o que Guille demostró, de nuevo, el poder de convertir en una colocación increíble tanto las recepciones buenas (que hubo muchas) como las no tan buenas. Así que me gustaría hablar en este post de “los otros”. De aquellos que no son titulares habituales y que tanto aportan al combinado nacional.


Ayer pudimos ver un variado recital de recursos españoles. Ya había hablado de esto el seleccionador en sus declaraciones tras la victoria del día anterior: “ha sido clave la participación de todos los jugadores, que han ayudado en momentos puntuales, ya sea en saque o en ataque, y es importante que todos los que están puedan aportar algo".

Los porteros Casillas y Dudek en un entrenamiento

Y tan importante. Saltemos un momento de deporte y miremos el caso de Iker Casillas, uno de los futbolistas españoles que más minutos ha disputado en su carrera deportiva. En raras ocasiones vemos jugar a sus suplentes. ¿Qué aliciente tienen, pues, los porteros que han desfilado como segundos del Real Madrid (César, Dudek, Adán…), que son estupendos profesionales y que podrían ser protagonistas en otros clubes, para preferir estar a la sombra del “santo”? Pues tienen la responsabilidad enorme de estar a la altura si algo sucede, de que no baje el nivel del equipo si se les necesita y, más allá de todo eso, de suponer una competencia efectiva en los entrenamientos, lo suficientemente dura como para hacer esforzarse al titular, para evitar que se relaje. Son, sin duda, directamente responsables de que Casillas sea cada vez mejor. 

Volvamos entonces a la maravilla de banquillo que tiene la Selección Española de voleibol, que no dudó en demostrar ayer, ante 1.350 espectadores en Vilanova i la Gertrú (y otros muchos al otro lado de la pantalla de televisión) que en absoluto parece un banquillo.

José M. Sugrañes

De entrada, el capitán, García-Torres, se quedó en el área de calentamiento al inicio del partido, para descansar y dejar paso como titular al central José Miguel Sugrañes, recién fichado por el CAI Voleibol Teruel y que resultó ser el máximo anotador del encuentro, con 16 puntos, seguido de Ibán Pérez y Sergio Noda (ambos con 15 puntos).

Fran Rodríguez

En el primer set, los griegos jugaron especialmente bien, ya que querían vengar las tres derrotas anteriores, pero ni con esas encontraron la manera de terminar la manga a su favor (27-25). En ese primer set vimos a Fran Rodríguez en el servicio, con esa cabeza suya que nos hace estar tranquilos cuando se acerca con el balón a la línea de saque y con ese giro de muñeca que tan efectivo es a la hora de descolocar la recepción del rival.
 

Víctor Viciana

En el segundo, el equipo heleno salió totalmente hundido ya que ni con su mejor juego había sido capaz de doblegar a España. Los nuestros fueron distanciándose en el marcador con una facilidad sorprendente: siete, diez, hasta once puntos de diferencia (16-5). Fue entonces cuando Fernando Muñoz decidió dar salida a los grandes jugadores que tiene en el banquillo. El colocador Víctor Viciana dio un respiro al omnipresente Guille Hernán, que apenas ha tenido vacaciones entre el final de la Liga y el inicio de la concentración con la Selección. Dani Rocamora saltó más tarde a la pista en lugar de Ibán Pérez y firmó cuatro puntos de ataque en el tiempo que estuvo en el campo. El gran receptor Gustavo Delgado también tuvo sus minutos en sustitución de Marlon Palharini. 

Gustavo Delgado

Con ese alto porcentaje de suplentes en la pista, España no sólo no rebajó su nivel sino que le dio a su juego un tinte muy particular, el de los jóvenes que quieren demostrar cosas y que saben cómo justificar en pocos minutos su puesto entre los elegidos. Fue un precioso final de set (25-18). Todos entrenan muy duro durante la semana y no es fácil mantener la templanza necesaria para estar en el punto perfecto cuando el equipo te necesita.

Daniel Rocamora

España se llevó el tercero (25-22) con la misma facilidad y las aportaciones otra vez de Rocamora y Viciana, que sustituyeron a Hernán y Pérez respectivamente con la intención de cambiar al colocador a la línea trasera y seguir contando con tres remates en la delantera.

España jugó como un equipo tranquilo que se sabe ganador, luchando todos los puntos y chocando las manos en los puntos perdidos con muchas ganas de ajustar cuentas en el siguiente. En definitiva, vimos un grupo pletórico y versátil. Quién sabe, quizá esa primera derrota contra Holanda tuvo cierta importancia para las hasta ahora siete victorias siguientes, como un ejemplo doloroso de lo que no queremos volver a repetir.

Dentro de tres días nos vamos a Austria para continuar nuestro camino hacia la final, con la tranquilidad de saber que nuestro equipo tiene doce titulares.

Foto de equipo realizada antes del primer partido en Vilanova